A principios de año el suplemento dominical del diario Segre, Lectura, publicó un reportaje sobre los relojes de sol patrimonio de la provincia de Lleida.
Hace unos años, en 2006 trabajamos en la construcción del reloj de sol de la rotonda entre Corregidor Escofet y Rosa Parks, del escultor Pep Solé. Y en 2007 trabajamos en el traslado del reloj de sol que ahora se encuentra en los Campos Elíseos y que antes estaba en las Balsas.
En el reportaje explican cómo la llegada del telégrafo y el tren hizo que los relojes de sol perdieran su utilidad social debido a las pequeñas diferencias de hora a lo largo del territorio. Pero antes de eso, plazas y paredes recibieron muchos de estos relojes que aún a día de hoy decoran nuestras ciudades. Y aún actualmente, hay escultores que diseñan estos aparatos, unos con una función más decorativa y otros que incluso tienen valor científico.
Es el caso del reloj de los Campos Elíseos, diseñado por Josep Maria Cots Massana para el parque de las Balsas. Se trata de un reloj ecuatorial helicoidal, un cilindro cortado en forma de hélice con las horas separadas cada 15 grados. Este es uno de los más interesantes por su diseño innovador y su exactitud horaria. En el año 2007, con la renovación del parque de los Campos Elíseos, también diseñador por Cots Massana, se trasladó el reloj desde las Balsas a su ubicación actual,
Hay trabajos constructivos que superan su valor funcional y además aportan un valor añadido, estético y de patrimonio.
En el reportaje se puede dar un paseo por todos los relojes de sol del territorio y descubrir otras formas de medir el tiempo.