Los principales motivos que estropean las aceras de nuestras calles son las raíces de los árboles, los cambios de temperatura, el paso del tiempo. Aunque también influye el tipo de material, el volumen de tránsito que hayan de soportar y el tipo de uso que se les dé.
Sea como sea, el mantenimiento de estas infraestructuras es realmente importante para el confort y la seguridad de los viandantes, sus principales usuarios. Además, hay que tener en cuenta la diversidad de estos usuarios, y el paso debe ser accesible para personas con movilidad reducida, ciegos y para carritos de bebé. Esto significa: accesos en rampa, suelos unificados, eliminar obstáculos, utilizar materiales y superficies antideslizandtes.
Por otro lado, este tipo de obras son igualmente habituales por la reparación o renovación de lo que hay debajo, todo el entramado de suministros: electricidad, agua, gas, internet, alcantarillado.